¿Hoja vertical o apaisada? Deja de imprimir como un Neanderthal

17 Jul 2024
es
Murphy

¿Cuántas veces has impreso un documento y te has encontrado con que la mitad de la información queda cortada en un margen invisible? ¿Eres de los que aún forcejean con la impresora para rotar la hoja y que las fotos no parezcan sacadas con un móvil de hace 10 años? Amigos, ha llegado el momento de hablar de la orientación de la página, y más concretamente, de por qué la hoja vertical debería ser la opción por defecto en vuestras vidas.

Vale, puede parecer una tontería. Al fin y al cabo, ¿qué más da cómo esté orientada la hoja mientras la información esté ahí? Pues sí que da, y mucho. La hoja vertical no es solo una cuestión estética, sino también de practicidad, legibilidad y, en última instancia, de cordura. Sí, habéis leído bien: elegir la orientación correcta puede salvaros de más de un dolor de cabeza (y de algunos improperios dirigidos a la impresora).

Antes de que los ordenadores invadieran nuestras vidas, la orientación horizontal, o "apaisada", tenía su razón de ser. Mapas, planos, partituras... algunos documentos simplemente se beneficiaban de tener más espacio a lo ancho. Pero en la era digital, donde la mayoría de las pantallas son rectangulares y la información se consume de forma vertical (pensad en las redes sociales, las páginas web...), la hoja apaisada se ha convertido en una especie de reliquia del pasado, un dinosaurio que se resiste a la extinción.

La hoja vertical, por otro lado, se adapta como un guante a la forma en que leemos e interactuamos con la información en el siglo XXI. Nos permite visualizar más texto de una sola vez, facilita el desplazamiento por el documento y, en general, ofrece una experiencia de lectura mucho más natural e intuitiva. Además, pensemos en el medio ambiente: menos papel desperdiciado, menos árboles talados, un planeta más feliz.

Pero no nos adelantemos. En este artículo, vamos a desgranar las bondades de la hoja vertical, explorando sus ventajas, desventajas (sí, también las hay, aunque pocas) y algunos consejos para sacarle el máximo partido. Al final, tendréis todas las herramientas para convertiros en unos auténticos ninjas de la orientación de página.

Ventajas y desventajas de la hoja vertical

Ventajas	Desventajas
Mejor legibilidad en pantallas y dispositivos móviles	Limitaciones para algunos tipos de contenido (mapas, gráficos anchos)
Mayor eficiencia en la impresión y menor desperdicio de papel	Puede requerir más páginas para mostrar la misma cantidad de información que una hoja apaisada
Se adapta al formato estándar de la mayoría de los documentos y páginas web

Como veis, las ventajas de la hoja vertical son numerosas, mientras que sus inconvenientes son fácilmente subsanables. Si necesitáis mostrar un gráfico ancho, siempre podéis girarlo 90 grados o dividirlo en varias páginas. Lo importante es que la mayor parte del documento sea legible y fácil de manejar.

En definitiva, la próxima vez que vayáis a imprimir un documento, pensad dos veces antes de dejar que la opción "apaisada" se cuele en vuestras vidas. La hoja vertical es vuestra amiga, y vuestras futuras impresiones (y el planeta) os lo agradecerán.